El Viernes Santo de 1998, aunque suspendiéramos la procesión del Santo Entierro, pasó a la historia de la Archicofradía por la consecución del ansiado sueño del nuevo trono, que en su primera fase pudimos ver completamente terminado.

Tras mil y un intentos, los talleres de los archicofrades hermanos Ruiz Martínez fueron los encargados de aportar al patrimonio de nuestra Hermandad la citada pieza que puede verse en la fotografía.

Este segundo trono del Sepulcro en su historia reciente, sustituye al anterior, que fuera estrenado el Viernes Santo de 1946, cuando desde la extinta Agrupación de Cofradías se volvía a incorporar la procesión del Santo Entierro a la entonces renaciente Semana Santa aloreña.

La obra, emblemática y de gran cariño para los “hermanos de Jesús”, fue del carpintero local Francisco José Pérez, conocido como “Frasquito José”, quien con algún que otro retoque en la madera, diseñó y realizó el catafalco que durante más de medio siglo procesionó nuestra imagen solamente.

Francisco Lucas Carrasco Bootello

Revista Nazareno de las Torres, año 1999