Desde muy antiguo – al menos desde principios del siglo XV- la advocación de “Misericordia” está íntimamente vinculada a la ciudad de Málaga a través de numerosas instituciones. Con tal denominación se conoció un Hospital, fundado por los Reyes Católicos, al que hacen referencia los Repartimientos de nuestra ciudad[1]; y una Hermandad constituida en la parroquia del Sagrario, formada por negros y esclavos a fines del siglo XV[2], y que se trasladó al antiguo Hospital de Santa Ana en el año 1610[3]; también se conoció durante el siglo XVII con tal denominación a la Real Hermandad de la Caridad, administradora del Hospital Real de Málaga, y heredera de actividad (enterramientos de caridad y asistencia sanitaria) de la primitiva hermandad de Negros y Esclavos[4]; así como otras instituciones sanitarias y asistenciales, como el Hospital de la Misericordia en Marbella, también fundado por los R.R.C.C.[5]A finales del siguiente siglo XVIII, se efectuó la fundación en la Iglesia parroquial de San Pedro de los Percheles, la que fue conocida como “Hermandad de la Misericordia”, que durante los últimos años de ése siglo y muy a principios del XIX, efectuó labores de asistencia sanitaria y social a los vecinos del citado barrio. Sus Constituciones fueron aprobadas por el Obispo el 6 de Septiembre de 1786[6], remitiéndose al Consejo de Castilla el 5 de Agosto de 1789[7]. Con fecha de 9 de Diciembre de 1791, se recibieron confirmaciones de aprobación por el Rey de España S.M. Carlos IV[8].
En la segunda mitad del siglo XIX, también se conoció con el nombre de “Colegio de la Misericordia” al asilo de huérfanos y ancianos que la Diputación Provincial de Málaga instaló en el antiguo y desamortizado convento de Santo Domingo, para pasar a principios del siglo XX al nuevo colegio construido en las afueras, en la actual zona de Santa Paula, más allá de la fábrica de Tabacalera.
Como ya es sabido, la actual cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Misericordia, fue constituida en la Iglesia del Carmen el 10 de abril de 1864[9]. El primer desfile procesional fue el de 1865, saliendo en estación de penitencia los años siguientes con normalidad, hasta 1868, año en que la revolución conocida como “La Gloriosa” hizo imposible el seguir procesionando externamente por las calles de Málaga.
Transcurridos unos años, y después de diversas solicitudes de los percheleros al respecto[10]- debido a la pequeñez y al lamentable estado de la iglesia parroquial de San Pedro – en 1883[11], el obispado decidió su cierre y la parroquia de San Pedro se trasladó a la Iglesia del Carmen. Ésta iglesia, propiedad hasta entonces del Ayuntamiento de Málaga como “Capilla de Torrijos”, fue constituida oficialmente como “Iglesia Parroquial de San Pedro”.
El traslado, que al principio tuvo carácter provisional, se convirtió en definitivo, y con el paso del tiempo, se le empezó a denominar “Parroquia de San Pedro y Nuestra Señora del Carmen”, nombre por el que fue conocida hasta la definitiva separación – de nuevo- de ambas parroquias, en 1943.
En 1883, y debido al estado ruinoso de San Pedro, con el traslado de la parroquia al Carmen (incluyendo el culto y el archivo parroquial), también se trasladaron las dos cofradías existentes en ella desde el siglo XVIII[12]: la de Nuestro Padre Jesús de la Buena Muerte (de San Pedro) y la de Nuestra Señora de los Dolores, que un año después, en 1884 se fusionaron en una sola cofradía[13]. Son abundantes las noticias bibliográficas de finales del S.XIX[14] y principios del S.XX15, que demuestran la presencia de las imágenes de éstas cofradías en el antiguo convento de San Andrés, y el traslado de ellas, unidas ya en una sola, a ésta iglesia[16].
Por lo tanto, se puede concretar que a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX y primeros años del XX, había establecidas en la iglesia del Carmen dos cofradías de Pasión: la de la Misericordia (fundada en 1864) y la de la Buena Muerte y Nuestra Señora de los Dolores procedente de la iglesia de San Pedro (desde 1883). Ninguna de las dos procesionó regularmente durante el citado período. Además de ellas, estaba también establecida en la iglesia del Carmen (desde 1863) la Hermandad de Gloria de Nuestra Señora del Carmen, de arraigada devoción popular en el barrio del Perchel.
En 1917, la llegada a la cofradía de la Misericordia como nuevo Hermano Mayor de D. Francisco de Asís Cabrera Anaya[17], supuso un fuerte impulso al deseo por parte de la corporación nazarena de la Misericordia, de volver a procesionar externamente a su Sagrado Titular, después del largo paréntesis provocado por las dificultades económicas y políticas de la segunda mitad del siglo XIX y primeros años del XX. Según el profesor Elías de Mateo Avilés18, el último desfile procesional de la Misericordia en el siglo XIX, fue la del año 1894.
Bien es verdad que en 1917, la cofradía de la Misericordia disponía de casi todos los elementos necesarios para organizar la procesión, pero no tenía tronos adecuados para ello, por lo que se dispuso a la adquisición de los mismos. Cuando la Misericordia decidió organizar la procesión para 1918, la otra cofradía de la parroquia, la de la Buena Muerte y Dolores, hizo lo mismo.
Es indudable, que al compartir sede canónica en el Carmen, entre ambas hermandades se establecieron estrechos vínculos de ayuda y cooperación, aunque mantuvieron – de momento- su independencia. Esta íntima colaboración entre ambas corporaciones nazarenas, se refleja en el hecho de que una gran parte de los directivos de ambas cofradías eran los mismos señores, aunque permutando los cargos que simultaneaban en ambas[19]. Sin embargo, a pesar de ésta íntima colaboración, ambas cofradías procesionaron por separados los primeros años, aunque con sólo una diferencia de dos horas (la Misericordia procesionaba a partir de las siete de la tarde, y Buena Muerte y Dolores, salía a las nueve de la noche). A todos los efectos, la Cofradía funcionaba como una sola hermandad, y así consta en el acta de fundación de la Agrupación de Cofradías de Málaga, donde sólo acudió el Hermano Mayor de la Misericordia, como representante de ambas hermandades. A partir del año de constitución de la Agrupación en 1921, a efectos económicos, la Misericordia era considerada como una cofradía de “dos tronos”, y cobrada la subvención de la Agrupación como tal[20].
De 1926, se conservan documentos oficiales de la cofradía en el Archivo del Gobierno Civil de Málaga, que van encabezados con el membrete de “Cofradías Fusionadas de Nuestro Padre Jesús de la Misericordia, Nuestro Padre Jesús de la Buena Muerte y Ánimas, y Nuestra Señora de los Dolores”[21]. Asimismo, diversos escritos e impresos dirigidos por la hermandad a la Agrupación de Cofradías, y otros documentos oficiales enviados al Gobierno Civil están encabezados por el citado membrete, lo que prueba que dicha fusión ya se había realizado por éstas fechas.
Aunque lamentablemente no existe certificación documental alguna sobre ello, tanto por las citas periodísticas, como por los escasos restos documentales hallados, tuvo que ser a lo largo del año 1926 cuando se efectuó el cambio de advocación a la Sagrada Imagen Titular de nuestra cofradía, que pasó a denominarse Nuestra Señora del Gran Poder. El motivo de éste cambio, no se ha podido aclarar hasta el momento presente. Una teoría es la de que la cofradía decidió sumarse a la petición del entonces Obispo de Málaga D. Manuel González García, de diversificar más las advocaciones marianas en nuestra ciudad (María Santísima del Amor de la Cofradía del Rico en 1924, y la Virgen de la Paloma en 1926, habían sido Dolorosas y cambiaron también de advocación); y otra teoría, es que fuese debido a una petición expresa del entonces párroco del Carmen D. José González Plaza, que tenía una especial devoción por la advocación del Gran Poder. En cualquier caso, puede acreditarse que fue a partir de éste año cuando se llevó a cabo dicho cambio, a pesar de que durante algunos años más, la casi totalidad de los medios de comunicación siguieron llamando – seguramente por inercia- a nuestra Sagrada Titular como Nuestra Señora de los Dolores.
Manuel Molina Gálvez
Archivero-Cronista.
